Autor: jeromor
viernes, 20 de mayo de 2005
Sección: Toponimia
Información publicada por: jeromor
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Dos fitotopónimos : Moraleja y Zarza-Zarzuela y su posible origen etimológico

Presenta la posibilidad de que dos fitotopónimos muy corrientes en España, Moraleja y Zarza- Zarzuela, no procedan de los étimos muy evidentes, moral y zarza, sino del latín Muratella 'murillos' y Quercea 'encina- encinar'.

Moraleja< lat. muratella

Todos los repertorios toponímicos asocian el topónimo al nombre del moral, morus nigra, árbol que produce las moras negras comestibles. Llama la atención la cantidad de topónimos que se hacen derivar de este árbol, de pequeña importancia en la vida del hombre. Hay en el repertorio de entidades de población española 15 localidades de nombre Moral, 14 Morales, y entre los derivados 10 Moraleja, 1 Moralejo, 1 Moralet, 1 Moralico, 1 Moralicos, 1 Moralina y 1 Moralita. Sorprende la presencia de tantas Moralejas, cuando el sufijo –eja no es de los más productivos, y sobre todo sorprende su gran presencia en la toponimia menor, aún en lugares donde es imposible que crecieran los morales.
Buscando documentación sobre el étimo de Moraleja me he encontrado con varios documentos mozárabes, publicados por Ángel González Palencia, en donde la misma localidad del alfoz de Toledo, hoy llamada Arcicóllar, aparece, entre otras, con las grafías M.rādī.l (Moradiel), M.rāl.lîa (Moralelia), lo que hace pensar en un étimo común en el latín vulgar *Muratella, “Murillos”, acusativo plural del neutro *Muratellum, derivado de Murus, “pared”.
28
Año 1140, Diciembre
Venta de la cuarta parte de
Villa Algariba,
alquería de Toledo,
en La Sagra,
cerca del castillo de
Canales,
encima de la acequia de Camarena,
próxima a la alquería de M.rādī.l

31
Año 1144, Abril

Venta de un ochavo
de la alquería de
Villa Algariba,
de la jurisdicción de Toledo,
en el pago de las Canales,
cerca de la alquería de M.rāl.līa y de Darcicolla

34
Año 1146, Octubre

Venta de una suerte de
tierra en la alquería de
Villa Algariba,
de la jurisdicción de Toledo,
en el pago de las Canales...
cerca de la alquería de M.rāl.līa de Darcicolla

1006
Año 1176, Julio
Testimonio
que da Domingo Salvatores, conocido por Arrayach... de los límites y términos de la alquería de Argance, alfoz de Toledo...
Hacia dentro del barranco que desde este Monteagudo corre hacia los límites de Camarena; entre el Val de Alhorrí y el barranco de Monteagudo hay un sendero que va de Argance a M.r.rīlīa

799
Año 1188, Septiembre
Cambio de fincas,
Don García entrega a don Fernando la mitad de todo lo que poseía su padre...
en la alquería de M.r.rālīa,
de Toledo

813
año 1225, Abril
Cambio, entre la abadesa doña OrAbona, del convento de S. Clemente... y doña Edeba...
El convento entrega una cuarta parte de las tierras... sitas encima del camino que va desde la alquería de Viyamiel a la de Algorfela... y por el lado del alfoz de la alquería de Camarena y del alfoz
de la alquería de Mūr.līa,
todas alquerías del alfoz de Toledo

En primer lugar hay que dejar claro que todos los documentos, con distinta ortografía, se refieren al mismo sitio, Moraleja de Darcicolla, hoy Arcicóllar . Nos lo aseguran las alquerias limítofes: Camarena, al N.
Algorfela, al SW. Es la Casa de Alburilla en el M.T.N. 1: 50.000, 604, Villaluenga, 1ª ed. 1881; y la Casa de Argurilla en la 2ª ed. 1965).
Villa Algariba, seguramente al S, sobre el arroyo de Cantaelgallo, entre Arcicóllar y Camarenilla.
Argance, hoy Casa de Argance, al S. de Arcicóllar, en el término municipal de Villamiel.
Todas están en La Sagra y en las cercanías del Castillo de Canales, que está en término de Recas, sobre el escarpe de la orilla izquierda del Guadarrama.
Las ortografías, como vemos, son variadas: M.rādī.l, Moradiel, M.rāl.līa, Moralella, M.r.rālīa, Moreralla, M.r.rīlīa, Morerilla, Mūr.līa, Murella, y deben de corresponder a pronunciaciones mozárabes más o menos influidas por el árabe o el romance, así como también reflejan las dificultades de los escribas árabes para reproducir la pronunciación.
Así que la evolución sería como sigue:
Muratella> *Muradela (con paso de sorda a sonora y simplificación de geminada)> Moradel (pérdida de vocal final y cambio de –u a –o por influencia árabe)> Moradiel (diptongación románica)
Otra evolución paralela, con menor influencia árabe sería:
Muratella> *Muradela (con paso de sorda a sonora y simplificación de geminada)> *Moradela (cambio de –u a –o por influencia árabe) > *Moralela (por metafonía)> *Moraliela(diptongación románica)> Moralelia (por metátesis)> Moraleja (solución típica castellana –li-> -j-)
Moraleja de Enmedio se llama así porque antiguamente había otras dos localidades del mismo nombre muy cerca. En el documento de confirmación por Alfonso VIII, el 12 de Diciembre de 1208, de los términos del Concejo de Segovia en la Transierra, colindantes con los de Alhamín, Toledo, Canales, Olmos y Madrid , se dice:
“...et sicut diuidit Serraniellos terminum cum Cubas et Grinnon, et sicut Moraleia de Petrofierro et Moraleia del Gordo, Moraleia de Lobofierro diuidunt terminum cum Humanes... ”. “(La divisoria) sigue por el límite de los términos de Serranillos con Cubas y Griñón, y por los de Moraleja de Petrofierro, Moraleja del Gordo y Moraleja de Lobofierro con el de Humanes... ”
Por tanto había tres localidades cercanas del mismo nombre, Moraleja, que recibían como apelativo seguramente el de sus repobladores en la segunda mitad del s. XII, Petro Fierro y Lupo Fierro, seguramente familiares y el Gordo. Hoy Moraleja de Petrofierro, luego llamada Moraleja Mayor y Moralejita, y Moraleja de Lobofierro, luego Moraleja de los Buyerros , están despobladas, quedando en el medio, de ahí su nombre actual, la que fue Moraleja del Gordo.
Estos documentos son bastante claros para considerar el topónimo Moraleja, no relacionado con el moral, sino con los del grupo mura, como Almuradiel, Mora, Morade, Moradela, Moradella, Moradiel, Moradillo, Morado, Morata, Moratalaz, Moratalla, Moratilla, Moratín, Moreda, Moredo, Morell, Morella, Morilla, Morvedre, Mura, Murada, Muradal, Muradela, Muradelle, Muras, Murazo, Murias, Muriedas, Muriel, Muriellos, Murieta, Murillo, Muro, Muros, etc., que indican que cuando el lugar recibió este nombre había allí restos de construcciones antiguas.
La dificultad mayor para considerar correcta esta evolución es el paso de u larga a o, pero J. Coromines apunta para Moratella, Moratell, Moratal, la procedencia del latín Mūratum –ata “derivat de murus, amb el sentit de (lloc o edificació) ‘murats, amurallats, aparedats’; car davant –R- la infl(uencia) de l’arab havia de canviar la u en o, cf. Morvedre MÛRUM VETÊREM, Mortitx MÛRTÎS...”. “El pas de mur- a mor-, és clar, és cosa de l’arab, pel timbre de tota damma davant r..”






Zarza< lat. quercea

Aunque el topónimo parece claramente derivarse del arbusto espinoso, me gustaría presentar la posibilidad de que estuviera relacionado con el grupo de topónimos derivados del latín quercus “encina”, como Cerceda, Cercedilla, Cercedo , etc. La relación la estableceríamos a través de la localidad medieval de Zarzuela,(Madrid) que aparece en un documento de 1140, en el que se establecen los límites de las tierras del Monasterio de Santa María de Batres, como Cerzola. Esta Cerzola podría ser un derivado de Quercus+ eola, nombre muy apropiado para localidades, como la Zarzuela del Monte del Pardo, situadas en el medio de un encinar. Querceola> *Kerceola> *Cerceola> *Cerciola> Cerzola> *Zarzola> Zarzuela. Como quercus es un nombre femenino de la 4ª declinación en latín, zarza podría derivar de la forma del latín quercea , “encina”.
Otra posibilidad es que del adjetivo querceus, “relativo a la encina”, provenga la forma de plural neutro *quercea, “sitio abundante en encinas, encinar”, al igual que del adjetivo *montaneus, “abundante en montes”, procede *montanea, plural neutro de dicho adjetivo, y de él nuestra palabra montaña . La evolución sería Quercea> *Kercea > *Kercia> *Cerza> Zarza.
Otro dato a favor de esta hipótesis sería que en otro de los encinares conservados en las cercanías, el de la Casa de Campo de Madrid, aparezca el topónimo El Zarzón,(curiosamente un calco del topónimo de origen mozárabe Alcorcón) que derivaría del mismo étimo con el sufijo abundencial –on .
Esta hipótesis que ahora presento explicaría la gran abundancia del topónimo en la toponimia española. Hasta 32 localidades españolas llevan el nombre de Zarza o sus derivados, Zarzalejo, Zarzón, Zarzosa, Zarzuela, etc., cuando la lógica no parece indicar que la humilde zarza sea el rasgo más relevante para bautizar un lugar de habitación humana. Algunas de las Zarzas cercanas, como Santa Cruz de la Zarza o Zarza de Tajo (To), estaban, hasta el s. XIX, en el medio de espesos encinares.

Copyright Jesús Rodríguez Morales. 2005


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Comentarios

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  1. #1 Brandan 12 de sep. 2007

    Algo más sobre la procedencia del moral:


    Manuel Jorge Aragoneses


    El Mueble Popular de Murcia


    descargas.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/12474067651270519043679/023461_0005.pdf 


    Me llama la atención uno que reúne los dos fitotopónimos: Moralzarzal


    Podría estarse refiriendo expresamente a la mora de la zarza, esto es, diferenciándose quizá de otros "zarzal" que indicasen otro origen.


    En mi opinión, no debería minimizarse la importancia que pudieron haber tenido la zarza y el zarzal en otros tiempos. De hecho, la zarza es una fuente de alimento importante en la dieta de muchas especies de insectos y aves, e incluso de algún oportunista en época de escasez, como el zorro. De ahí la facilidad para su propagación. Como lugar de nidificación y refugio, sobre todo si hay rocas a su alrededor, no tiene rival.


    No es despreciable tampoco la cualidad de indicar lugares en los que se recoge la huedad en el subsuelo.


    Lo que hoy nos parece un arbusto molesto e incluso peligroso, pudo ser -en caso de que existiese ya entonces- una fuente de alimento estacional (la mejor estación, por cierto) para nómadas recolectores e incluso poblaciones incipientes.


    Tengo entendido que incluso tiene o tuvo una cierta importancia en la elAboración de algunos vinos.


    La relación con el Quercus que propone Jeromor me parece que puede ser acertada en algunos casos. Una lástima la escasez de estudios polínicos.


    Por aquí, ya lo hemos comentado en otros foros, tenemos una gran cantidad de topónimos "moros", y sospecho que no todos tienen la mima procedencia. Nombro algunos:


    Navalmoro, Navamorales, Navamorisca, Cepeda de la Mora, Navamures, Navalmoral, ..., y Cueva de la Mora y Canchalamora, Prao Moro, Huerta de la Mora, Cuna de los Moros, etcétera, para aburrir. También tenemos un La Zarza (pueblo), más de roble que de encina, por no salir del Quercus.

  2. #2 Brandan 14 de sep. 2007

    Puede que no nos terminen de convencer las razones naturalistas para aceptar la relevancia de las zarzas, aunque recomiendo considerar la posibilidad de que quienes acuñaron el fitotopónimo -en los casos en que realmente estemos ante uno de ellos- tomando como referencia esta planta, tuviesen un punto de vista mucho más naturalista que el más naturalista que nosotros podamos tener en la actualidad.


    Creo que incluso sus particularidades negativas pudieron influir a la hora de denominar un cierto lugar. Quiero decir que hay zonas que por sus características hacían necesaria una ingente lAbor de acondicionamiento, y que precisamente por estas características fueron así nombrados. Lagunas, tremedales, etcétera, tienen aún -en algunos casos- un nombre que señala su antigua condición, ya modificada. Un lugar extenso, enmarañado por la proliferación de este arbusto, que podría impedir el paso en determinados lugares, no sería posiblemente una mala referencia toponímica, aunque nada más fuese para situarlo, y evitarlo, consiguientemente.


    Lo cierto es que el arbusto en cuestión -la zarza- alguna relevancia debió tener para dejar en el lenguaje la impronta de un verbo. En su primer significado:


    enzarzar1.




    1. tr. Poner zarzas en algo o cubrirlo de ellas.


    Parece que se está refiriendo a la función que mencionaba de hacer que las zarzas crezcan alredededor de determinado lugar con el fin de protegerlo.


    Efecto que queda confirmado -en mi opinión- por otra acepción:



    3. prnl. Enredarse en las zarzas, matorrales o cualquier otra cosa.


    Otros, abundan en el concepto de enredo, de laberinto:


     


    2. tr. Enredar a varios entre sí, sembrando discordias y disensiones. U. t. c. prnl.


    4. prnl. Meterse en negocios arduos y de salida dificultosa.


    Que puede resultar incluso peligroso o violento.


    5. prnl. Reñir, pelearse.


    No debe ser casual que este arbusto espinoso se haya impuesto, a la hora de homologar sus efectos a las más arduas situaciones personales de un individuo, a otros de similares características; como el rosal silvestre, por ejemplo, cuyas espinas son más molestas y peligrosas que las de la zarza. Quizá se filtró un cierto optimismo en el lenguaje, al fin y al cAbo, nuestra estimada zarza termina ofreciendo algún fruto.


    Pero hay algo más:


     enzarzar2.





    1. tr. Poner zarzos en los lugares donde se crían los gusanos de seda.


    Es una relación -aunque remota- con el moral.


    Esto nos lleva, claro, a ocuparnos del término:


    zarzo.


    (Delant. sarzo, y este der. de sarzir, zurcir).



    1. m. Tejido de varas, cañas, mimbres o juncos, que forma una superficie plana.


    2. m. Cosa realizada con este tejido.


    Y, aún sin ánimo de enrevesar aún más la cuestión, créanme, no tengo más remedio que señalar que hay algún otro término del que podrían haber derivado -o no- algún topónimo y que podría no tener nada que ver con zarzas o quercus:



    zarcillo: Del lat. circellus, circulito; y sarcellum, por sarcŭlum, azada.


     


     

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